Wert abandona el barco incapaz de aplicar la LOMCE. SUATEA pide la paralización de la ley

Amplía la imagen de peticiones a los partidos políticos

Las presiones ejercidas desde la comunidad educativa contra las políticas aplicadas por Wert han encontrado su respuesta con la dimisión encubierta del ministro peor valorado del Gobierno.

Después de un curso demandando su cese, con el rechazo de todos los sectores de la educación ante imposiciones como la subida de tasas universitarias, el recorte de becas o el llamado 3+2, logramos ver que han dado sus frutos creando una crisis política en el PP a escaso tiempo de las elecciones generales. Desde la perspectiva del profesorado, el paso de Wert por el ministerio supuso: el aumento de las horas lectivas, del número de alumnos y la diminución de la plantilla, todo ello aplicado a rajatabla por nuestra Consejera Ana González, que nos ha llevado a unas tasas de interinidad inaceptables, al aumento de las medias jornadas y una situación de sobresfuerzo generalizado que mina la posibilidad de mantener la calidad educativa que todos y todas deseamos.

No obstante, la normativa más trascendente y agresiva que este ministro elaboró contra la educación pública es la LOMCE, ley que ha conseguido el rechazo unánime de sindicatos de profesorado, asociaciones de estudiantes y confederaciones de las familias reflejado en las protestas y movilizaciones, huelga incluida. En pleno proceso de aplicación de esta ley, que supone un retroceso de décadas, poniendo en peligro el acceso a la titulación en ESO de aquel alumnado que se derive a los Programas de Mejora del Aprendizaje y el Rendimiento, o el camino sin salida ni posibilidad de retorno para aquellos que se deriven a la FP Básica, desde el Consejo Escolar del Principado se ha solicitado, por unanimidad, la moratoria por un curso escolar.

Amparándose en esa declaración de la comunidad educativa y aprovechando este momento en que el titular del Ministerio abandona el barco, en pleno proceso de aplicación de la nueva ley, la Consejería de educación debería dar un paso adelante, exigir esa moratoria y no proceder a implantarla el próximo curso.

Desde SUATEA consideramos que la precipitación con la que se quiere aplicar el calendario LOMCE, la dificultad organizativa que ello implica para los centros docentes y las consecuencias que conlleva sobre profesorado y alumnado son motivos más que suficientes para exigir la paralización de la misma.

Uviéu, 20 de mayo de 2015