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Al tiempo que el departamento de comunicación de la consejera Espina publica notas de prensa en las que presume de inversión récord en inclusión, siguen llegándonos denuncias a diario desde numerosos centros educativos referentes a los recortes encubiertos que se están produciendo en la plantilla educativa asturiana en este inicio de curso 2024-25.
La “trampa” que ha decidido usar la Administración asturiana tiene su origen en los recortes del primer mandato de Mariano Rajoy, allá por 2012. Cuando, años después de los mismos, y gracias a la movilización del profesorado, se consiguió por fin revertir parte de estos recortes y volver a las 18 horas lectivas para el profesorado de Secundaria y FP, se introdujo una cláusula por la cual el profesorado de esas etapas podía cerrar sus horarios hasta con un máximo de 21 horas lectivas de forma excepcional, si las necesidades del centro educativo así lo requerían.
Ahora, y de un año para otro, podría parecer que han cambiado las necesidades de una amplia mayoría de centros de Secundaria asturianos. La realidad es que la Consejería de Educación ha dado con la manera de recortar en personal de forma encubierta, haciendo de la excepción norma, ya que tenemos noticias de decenas de centros educativos en los que la mayoría del profesorado tiene más de 18 horas lectivas en su horario de este curso. Sin previo aviso, los equipos directivos se están encontrando con que se ha recortado personal de sus necesidades autorizadas de profesorado.
Esto repercute en la calidad de la educación y en la atención que recibe el alumnado asturiano, ya que los docentes tenemos menos tiempo para coordinarnos, preparar nuestras clases, reunirnos con las familias o atender a la cada vez más creciente diversidad en las aulas.
A Adrian Barbón y Lydia Espina se les llena la boca hablando de defensa de la escuela pública, pero los datos demuestran que cada inicio de curso las cosas van a peor. La falta de recursos es la tónica general en la gran mayoría de los centros públicos asturianos, mientras un gobierno que presume de progresista dedica a la educación concertada, no se nos olvide, más de 105 millones de euros en los presupuestos de este año 2024.
Desde el SUATEA exigimos que la cláusula de las 21 horas se aplique tal y como está redactada: de forma excepcional. No hay defensa posible de la escuela pública si no va acompañada de inversión.
Uviéu, 12 de setiembre de 2024
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