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En estas últimas semanas han sido varias las noticias de prensa donde se recoge el cierre del colegio público avilesino Virgen de la Mareas, en tanto que las dependencias que el mismo ocupa a día de hoy pasarían a ser ocupadas por el CIFP del Deporte. Ante estas noticias, la consejería de educación ha dado la callada por respuesta.
Tal cierre supondría un hecho inaudito, pues dejaría sin centro público a una de las zonas de escolarización de Avilés, el tercer concejo de Asturias por cantidad de población, zona por cierto, que mantendría no uno ni dos centros concertados, sino nada más y nada menos que tres.
Desde el sindicato no podemos quedarnos de brazos cruzados ante este ataque a la escuela pública, a la escuela de todos y de todas. ¿Podemos imaginarnos un barrio sin equipamientos tan esenciales como un centro de salud? La respuesta es evidente, no. Pues si extrapolamos la situación al plano educativo, tampoco podemos imaginarnos a un barrio sin un equipamiento tan esencial como un colegio, privando en este caso a 31 discentes y sus respectivas familias al derecho de acceso a una educación pública.
No estamos hablando de un colegio que vaya en disminución por el número de alumnos y alumnas para el venidero curso, no es un centro con unas instalaciones en deterioro, es un centro con futuro, y que por tanto debe de mantenerse, como se ha mantenido hasta día de hoy.
Por tanto, SUATEA exige el mantenimiento del CP Virgen de las Marea, sin suponer de ninguna manera prejuicio alguno para la viabilidad del CIFP del Deporte, de ahí que es misión de la consejería buscar espacios alternativos, sin ir en contra la escuela pública ni de ningún centro que la conforma.
Uviéu a 28 de enero de 2019
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