SUATEA espera que el nuevo gobierno asturiano haga los deberes pendientes si quiere aprobar

El sindicato educativo SUATEA le recuerda a Javier Fernández que es necesario un cambio en las formas y en el contenido de las políticas educativas que desarrolló el gobierno en la última legislatura, si quiere mantener un sistema educativo público de calidad y al servicio de las necesidades de la sociedad asturiana.

Esta última legislatura a manos del gobierno de la FSA-PSOE estuvo marcada por el escándalo del caso Marea que afectaba a la anterior administración. No se supo o no se quiso parar en el camino abocado al desastre, a la desorganización, al cortoplacismo y a la improvisación que lleva reinando en la Consejería durante más legislaturas de las deseables para la buena salud del sistema educativo asturiano.

El gobierno de Javier Fernández tiene por delante 4 años, si acaba la legislatura, para parar, dar marcha atrás y reconducir la mayoría de las políticas que se desarrollaron en la Consejería de Educación de la mano de Ana González.

En las últimas semanas estamos viendo reflejarse el desastre de la Oferta Pública de Empleo, consecuencia directa de un acuerdo de interinos que es necesario e imprescindible derogar, y al tiempo sentarse en la mesa con el conjunto de las organizaciones sindicales a negociar un acuerdo justo y equitativo fruto del consenso y no de la imposición como es el actual.

Los docentes del sistema educativo público asturiano llevamos sufriendo ataques por parte de la administración durante todos estos años, sacando adelante el trabajo en condiciones que no son las mejores y garantizando un nivel de calidad gracias principalmente al buen desempeño profesional del conjunto del profesorado, sin que por parte de quien gobierna hubiera el más mínimo gesto de dignificar la profesión.

Hace tres años la Consejera de Educación, Ana González, se comprometió a que antes de acabar la legislatura los docentes de Lengua Asturiana iban a ver reconocida su labor con la creación de la Especialidad. Después de este tiempo seguimos esperando que se cumpla con esta demanda de este colectivo y de este sindicato. Tres años en los que la Consejería y el Ministerio lo único que hicieron fue enredarse en el tuya-mía. Si hubiera intención real de dignificar el área de Lengua asturiana la Consejería tiene todas las herramientas necesarias, tal y como le vienen recordando desde el Ministerio, para crear la especialidad.

Esta última legislatura estuvo marcada por el recorte en las plantillas docentes, se dotó a los centros educativos del mínimo imprescindible de profesionales para su funcionamiento. Esta política se reflejó en un aumento significativo de las medias jornadas con la intención de ocultar estos recortes en las plantillas de los centros a la opinión pública. Sus consecuencias son una cada vez más mermada posibilidad de atender a la diversidad y a las necesidades educativas especiales, dejando de atender a principios básicos de la educación como son la equidad y la inclusión.

Esperamos que por fin, desde la nueva Consejería que se constituya, se pongan las medidas necesarias para disminuir el daño que la LOMCE está haciendo en el sistema educativo público asturiano. Hasta ahora la única política que se hizo de oposición a esta denostada Ley fue la de decir públicamente lo mala que era, para luego aplicarla como buenos alumnos aventajados de las políticas neoliberales que emanan del Ministerio.

Uviéu, 23 julio de 2015.