La exclusión social en la infancia: no sobran docentes faltan recursos

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Facultad de formación profesorado y pegadogia. Maxisterio PedagoxíaLos niños acusan especialmente las carencias en los ingresos familiares. Los alimentos que ingieren, el lugar donde viven, el tiempo que pasan con sus padres y amigos, y los servicios públicos a los que tienen derecho son factores importantes que determinan su bienestar (UNICEF. «Los niños de la recesión. El impacto de la crisis económica en el binestar infantil en los paises ricos»).

El reciente informe publicado por UNICEF pone en relación estrecha la falta de inversión educativa de algunos países- amparándose en la excusa de la crisis- con la situación de pobreza en la que se encuentran millones de niños y niñas. Nuestro país está entre los que más han empeorado desde el inicio de la llamada crisis. Cerca de tres millones de niños y niñas están por debajo del umbral de la pobreza en el estado, con un incremento de 800.000 entre 2008 y 2012.

En ese estudio se muestra cómo la falta de políticas sociales y educativas está influyendo en el sector más vulnerable de la sociedad. Es una demostración de algo que desde SUATEA tenemos muy claro: la reducción de la inversión educativa por parte de las Administraciones estatal y autonómicas trae como consecuencia exacerbar la situación de desamparo de millones de niños y niñas. La falta de gasto en educación pública conlleva un agravamiento de la situación de este alumnado.

Asturies no es una isla de bienestar para miles de niñas y niños. Muchas familias se han visto privadas en nuestra Comunidad de lo más elemental. La falta de recursos de estas familias pone en peligro la situación de sus hijos e hijas, un peligro que hace que quienes se encuentren en esta situación tendrán cada vez más difícil salir de ella. Sin recursos, sin políticas educativas compensatorias, la salida es imposible. Por ello los centros educativos deberían poder paliar y compensar esas situaciones que afectan a la parte más vulnerable de la sociedad. La gratuidad total de la educación pública, incluyendo todos los servicios complementarios debería ser una realidad.

Los apoyos educativos, la posibilidad de compensar realmente las situaciones mencionadas, la atención a la diversidad, son incompatibles con los recortes que estamos sufriendo y que han reducido la inversión pública en educación pasando en 2008 de un 5’1% del PIB a un 4’3% en 2012. Pero en Asturies, a pesar de los discursos de la Consejera de Educación a favor de la Enseñanza Pública la realidad es que los centros educativos cada vez cuentan con menos docentes para desarrollar cada vez más trabajo. Que los apoyos se debilitan, que el profesorado, sobrecargado de trabajo, no puede realizar atención individualizada.

Es necesario pues un cambio radical en las políticas educativas, también en Asturies. Y no son de recibo declaraciones como las llevadas a cabo por la Consejera de Educación en el sentido de que hay que establecer numerus clausus en la Universidad para quien desee ser docente.

Cuando hay de orden de 500 jubilaciones anuales, si nuestro sistema no puede asumir al alumnado de la Facultad de Educación, hay que decir que hoy los centros educativos están en una situación de precariedad que dificulta el trabajo con el alumnado. Un tercio de la plantilla cambia todos los años. Casi 1000 docentes interinos trabajan a media jornada, cuando los centros los demandaban a jornada completa. Se ha reducido el número de docentes total cuando ha aumentado el alumnado y este cada vez tiene más necesidades.

Creemos que en este país no sólo no sobran docentes, sino que faltan. Y en Asturies la consejera puede, si quiere, bajar la carga horaria de un profesorado que no puede desarrollar sus tareas; puede reducir el número de alumnos y alumnas que atiende cada docente; puede dotar a los centros para que los centros educativos procuren compensar las desigualdades que afectan a nuestra infancia.

No sobran docentes ni aspirantes a docentes. Sobran quienes dilapidan los dineros públicos y que favorecen la privatización del sistema educativo, manteniendo los conciertos, creando consorcios como el de la Educación infantil de 0 a 3 años, privando al alumnado y a los centros del profesorado necesario para poder formar ciudadanos y ciudadanas en igualdad de derechos.

Beatriz Quirós Madariaga, Secretariado de SUATEA y Consejera Escolar del Estado.

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